viernes, 27 de abril de 2012

MI JUEVES: "Manías, supersticiones, amuletos y otras 'rarezas' varias"


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Salir de casa con el pie derecho, nunca pasar debajo de una escalera, quemar romero todos los viernes, no usar un determinado tipo de slips... 

Jejeje, esto daba para mucho. 

Esa mañana, en el trabajo, y mientras daban de comer a los abuelos, fue el tema de conversación. Nunca había sido de supersticiones, ni creía en la mala suerte, ni que el destino de cada uno estuviera escrito. Las cosas sucedían, simplemente. A ella que no le vinieran diciendo que vaya racha que llevaba. 

¿Y manías?

 Hubo un tiempo en que cada vez que salía de casa, entraba de nuevo a comprobar si había apagado el gas, hasta repetirlo dos veces, pero aquello acabó en cuanto se puso a trabajar y su tiempo era el justo de salir corriendo. 

Seguramente tendría más que, insconcientemente, formarían parte de sí misma. Para manías, su hijos, que dejaban las cosas donde no debían, dentro de su propio orden, claro, hasta que comprendió que cada uno tiene el suyo. 

En cuanto a tener amuletos, es verdad que conservaba ciertas cosas de las que nunca se desprendería. Cosas que llevaban mucho tiempo con ella, pero que no llevó nunca ante un examen, un viaje o en algún momento que creyera que necesitara suerte. Aunque pensándolo bien, sí habia algo que le hacía crecer ante las adversidades, que le hacía no sentirse sola, ser fuerte, seguir adelante. 

Una especie de talismán con la que se sentía protegida. Tan sólo unas palabras del hombre que amaba:

-Yo velaré por tí, mi niña. Que no se te olvide nunca, cada minuto, cada segundo de mi pensamiento, es tuyo. 

Lola



 

4 comentarios:

  1. Por supuesto que es importante tener alguien que vele por ti, que te quiera, que te apoye. Es cierto que la gente se siente mucho más fuerte teniendo alguien a su lado. Es muy bonita tu entrada, hermana.

    Un beso

    Mari Carmen

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  2. Cada quien le da a las cosas (y a la gente) que ama, el poder de tener hondo significado en nuestra propia manera de ser. Somos nosotros los que le damos "poder" a las cosas, no a la inversa.

    Un abrazo juevero!
    =)

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  3. en todo momento creo que hablas de ti...
    pero obviando esto..no, no obviándolo, loli, me aprece no magistral, pero más que bien logrado este relato...el uso de la tercera parsona para referirse a vos misma, me ha encantado...
    eh, puedo estar equivocado con respecto a que hables de ti...
    y esos viejetes ...deberás un día hacerles carantoñas para que te hablen de sus manías. sería digno de conocerlas..
    pero pero...ese almuleto del que hablas..ese maridito...ese...ese amor sí que es la hostia...
    medio beso.

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  4. Lola, ¡perdón por la tardanza en comentar tu entrada y por no enlazarte antes en la convocatoria! es que he estado fuera desde el viernes y no tenía internet. Me ha gustado mucho el texto, ¡ojalá todos tuviéramos un amuleto así... al menos anima y es un gran apoyo, después, lo que tenga que ser será, eso está claro. Un beso. ¡y perdón de nuevo!

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